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¿Qué sistema de calefacción es más adecuado para mis necesidades?

​Con la llegada del frío tenemos la necesidad de acondicionar nuestro hogar pero, ¿qué sistema se adapta más a nuestras necesidades? en Jaype disponemos de diferentes opciones para distintas aplicaciones. 

 

El calor tradicional de la leña sigue siendo el preferido por aquellos que tienen una vivienda unifamiliar o viven en el campo por ser el sistema más agradable, teniendo en cuenta que es un tipo de calor que emite humos, produce ceniza y que la madera no es fácil de transportar y acumular si se tiene una vivienda en la ciudad.

Existen gran variedad de diseños, tamaños y tipologías de chimeneas y salamandras, son muy apropiados para calentar grandes espacios. Debemos tener en cuenta que las chimenea de fundición tienen mas inercia térmica que la de chapa, tardan más en llegar a su rendimiento máximo pero por el contrario mantienen mejor el calor, lo que repercute en un menor consumo.  

Es uno de los sistemas de calefacción más económico, incluso el propio consumidor puede producir su propia leña si tiene los medios necesarios.

Las chimeneas de pellet son una muy buena opción para el que busca el calor tradicional del fuego sin contar con las desventajas de la leña, ya que la emisión de humos y producción de ceniza es mucho menor, el volumen de combustible a acumular permite instalarse en ciudad cómodamente y su coste por kwh es similar al de la leña. Del mismo modo que las chimeneas y estufas de leña, son apropiadas para calentar grandes estancias.

Si hablamos de sistemas de calefacción portátil, para poderse utilizar en cualquier espacio de nuestro hogar, las estufas de gas son la opción más económica, si bien debe tomarse siempre la precaución de tener la zona donde esté instalada bien ventilada ya que la combustión del butano consume oxígeno.

Existen 3 tipos de estufa con diversos rendimientos:

  • De infrarrojos, calientan una placa frontal cerámica donde el calor se propaga de forma radiante y por convección.​
  • Catalítica, es la que menos consume y la más segura ya que no funciona con fuego directo. El calor se transmite de forma radiante. 
  • De llama azul, disponen de un quemador lineal donde el calor se propaga por convección consiguiendo calentar el espacio cn mayor rapidez que las dos anteriores. 

En cuanto a equipos eléctricos podríamos decir que es la solución más sencilla ya que el combustible lo tenemos en nuestro propio hogar. Por el contrario es el sistema más caro por kwh de calor emitido, aunque finalmente el coste de la energía consumida vendrá definido por la potencia en particular de cada aparato. 

Los calefactores cuentan con una gran potencia, son capaces de calentar rápidamente un espacio al contar con un ventilador que propaga el calor, son apropiados por ejemplo para calentar una habitación o un cuarto de baño. Son por el contrario los equipos eléctricos que más consumen porque requieren de grandes potencias. 

Los convectores disponen de una resistencia que caliente el aire frío que entra por la parte inferior del aparato y lo expulsa por la parte superior. Son indicados para grandes espacios aunque con la ventaja de ser más silenciosos y de menos potencia que los calentadores. Existen modelos que además de por convección disponen de un ventilador para propagar el calor más rápidamente.

Los acumuladores almacenan el calor producido en un núcleo cerámico aislando el calor para un posterior uso. Es apropiado para aprovechar el ciclo de carga en horas valle y el ciclo de descarga en horas punta de tarificación eléctrica. Por contra el precio del aparato es significativamente mas elevado que el resto de aparatos eléctricos. 

Los radiadores no son indicados para calentar grandes espacios, más bien son para calentar el espacio más próximo a ellos, por el contrario consumen menos que los calefactores. Existen diferentes opciones de estufa:

  • De aceite: Tienen una inercia térmica, tardan un poco más al calentarse pero mantienen el calor un tiempo una vez desenchufados​
  • De infrarojos y halógenos: Generan un calor muy similar al emitido por el sol, producen calor al momento y emiten además de por radiación directa, por convección natural. Debe tenerse en cuenta que además emiten algo de luz. Son indicados para calentar zonas concretas o espacios reducidos.
  • Emisores térmicos de aluminio y radiadores de mica: Mediante una resistencia calientan una placa que reparte el calor de forma uniforme. Emiten calor por convección y mayoritariamente por radiación con la diferencia que la superficie de radiación es mayor que en los calefactores de infrarojos, por lo que tambien son más aparatosos. ​
  • ​Biochimeneas: Este tipo de calefacción funciona mediante la combustión de bioetanol que no produce humo ni cenizas aunque puede desprender algo de olor. Es un sistema indicado para calentar un pequeño salón, aunque debe tenerse en cuenta su alto coste por kwh de calor emitido, por encima del producido mediante electricidad. Su gran atractivo es que resulta un gran elemento decorativo. 
  • Estufas de parafina o keroseno: Funcionan mediante la combustión de parafina emitiendo calor rápidamente. Son aptas para grandes espacios aunque del mismo modo que las estufas de gas, emiten CO2 por lo que debe instalarse en una zona ventilada y evitarse en dormitorios. Por contra no producen humedad en el ambiente. El coste del combustible es su principal desventaja. Otro aspecto a tener en cuenta es que produce cierto olor en el momento de encender y apagar la estufa. 
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